Lo que para algunos puede parecer innecesario, es algo imprescindible que hoy, les aventaja. En tiempos de exposición máxima como son los Juegos Olímpicos de Tokio, quienes estarán un paso por delante en cuanto a repercusión mediática y económica, son aquellos deportistas que comprenden lo que en breve será un requisito obligatorio: la marca personal online.
Pasar desapercibido y mantener discreción, es la excusa principal para esquivarle al éxito. Por eso mismo, muchos de los deportistas que no aprovechan el terreno digital, les cuesta cada vez más cerrar nuevos contratos; algo que también puede haberse acrecentado por la pandemia que azotó sanitaria y económicamente al mundo. Y las nuevas propuestas de patrocinio deportivo sobre la mesa, en la mayoría de las disciplinas, no abundan.
Cambio de época
Los tiempos cambian y si mantenemos la misma mentalidad del siglo XX, de deportistas sumamente exitosos que no pudieron explotar su imagen, el futuro será más difícil. Las herramientas digitales ya son parte de nuestro presente y una necesidad en nuestras vidas.
Son muchos los ejemplos: el campeón mundial de fútbol Andreas Brehme, contrajo deudas por 200 mil euros y pasó de trabajar en avisos publicitarios a escuchar ofertas para limpiar sanitarios. El goleador chileno Iván Zamorano debió vender su casa, catorce apartamentos, un auto de lujo y estudia vender más bienes para poder quedar al día.
Mike Tyson logró cerca de 300 millones de dólares de ganancias, pero se declaró en quiebra en 2003. El campeón de peso pesado de todos los tiempos pudo reponerse con distintos emprendimientos económicos catapultados por el branding y su marca personal.
10 grandes beneficios
- Diferenciarte del resto de los deportistas.
- Identificarte y posicionarte.
- Incremento de red de contactos: networking.
- Generación de confianza.
- Gestionar tu reputación.
- Prestigio, reconocimiento y notoriedad.
- Influencia en el sector.
- Creación de comunidad.
- Atracción de potenciales patrocinadores.
- Diversificación de ingresos: propuestas para nuevos proyectos y posibilidad de representar distintas marcas.
Gestiona tu propia reputación
Un requisito fundamental de tener tu propia marca personal es seguir un hilo de coherencia, capaz de gestionar tu propia reputación. El mundo digital es cada vez más exigente y no sólo se trata de subir contenido sólo por el hecho de subir.
La estrategia digital es fundamental para demostrar de lo que eres capaz de hacer. Un proyecto de Personal Branding lo suficientemente sólido puede catapultarte al público, a los medios y al éxito comercial.
Tener una marca personal propia aumenta la autoconfianza y neutraliza posibles conflictos con terceros entre otros. Y no se trata de sólo quedar bien, si no de ser una persona auténtica, capaz de multiplicar recursos por el hecho de, simplemente… ser uno mismo.